sábado, 11 de abril de 2015

Ser Femenino


Paréntesis Musical (♫) sugerido para esta lectura:


El hombre y la mujer no sólo son diferentes físicamente; son diferentes psicológicamente. El sexo no es sólo una diferencia en el cuerpo; es también una diferencia de psicologías. Una mente femenina significa receptividad: receptividad total, entrega, amor. Un discípulo necesita una psicología femenina; de lo contrario no podrá aprender. Puedes preguntar, pero si no estás abierto, no podrás ser contestado. Puedes hacer una pregunta y aun así seguir cerrado. Entonces la respuesta no puede penetrar en ti. Tus puertas están cerradas; estás muerto. No estás abierto.

Una receptividad femenina significa una receptividad como la del útero en la profundidad interna, de modo que puedas ser receptivo. Y no sólo eso: significa mucho más. Una mujer no sólo está recibiendo algo; en cuanto lo recibe se convierte en parte de su cuerpo. Se recibe un niño. Una mujer concibe; en el momento en que se produce la concepción, el niño se ha convertido en parte del cuerpo femenino. No es un extraño, no es un forastero. Ha sido absorbido. Ahora el niño no vivirá como algo añadido a la madre, sino simplemente como una parte, simplemente como la madre. Y el niño no sólo es recibido; el cuerpo femenino se vuelve creativo, el niño comienza a crecer.

Un discípulo necesita una receptividad como la del útero. Lo que se reciba no debe ser acumulado como conocimiento muerto. Debe crecer en ti; debe convertirse en sangre y huesos dentro de ti. Debe convertirse en una parte, ahora. ¡Debe crecer! Este crecimiento te cambiará, te transformará a ti, el receptor.

Y ahora la psicología moderna, especialmente el psicoanálisis, dice que el hombre es hombre y mujer. Nadie es sólo varón y nadie es sólo hembra; todo el mundo es bisexual. Los dos sexos están presentes. Ésta es una investigación muy reciente en Occidente, pero para el tantra éste ha sido uno de los conceptos más básicos desde hace miles de años. Debes de haber visto imágenes de Shiva como ardhanarishwar: mitad hombre, mitad mujer. No hay otro concepto como éste en toda la historia humana. Shiva es representado como mitad hombre, mitad mujer.

A no ser que un discípulo se convierta en la otra mitad del maestro, es imposible transmitir la enseñanza más alta, los métodos esotéricos. Cuando te haces uno, no hay duda. Cuando eres uno con el maestro -tan totalmente uno, tan profundamente uno-, no hay debate, no hay lógica, no hay razón. Uno simplemente absorbe; uno se vuelve un útero.

Osho, El libro de los Secretos
Fuente: Centro Osho Akeed 

No hay comentarios:

Publicar un comentario