De su genio surgieron palabras que conmueven a sus lectores e interpelan a los poderes que históricamente marcaron la vida del mundo. Tenía 74 años.
Galeano fue sin duda uno de los cronistas de trayectoria más incisiva, inteligente y creadora de América Latina. Su producción, traducida a más de veinte lenguas, es una perpetua y polémica interpretación de la realidad del continente.
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Galeano: No vale la pena vivir para ganar, vale la pena vivir para seguir tu conciencia.
¿Qué tal si clavamos los ojos más allá de la infamia para adivinar otro mundo posible?
El aire estará limpio de todo veneno que no provenga de los miedos humanos y de las humanas pasiones.
En las calles los automóviles serán aplastados por los perros.
La gente no será manejada por el automóvil, ni será programada por el ordenador, ni será comprada por el supermercado, ni será tampoco mirada por el televisor.
El televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia y será tratado como la plancha o el lavarropas.
Se incorporará a los códigos penales el delito de estupidez que cometen quienes viven por tener o por ganar, en vez de vivir por vivir no más, como canta el pájaro sin saber que canta y como juega el niño sin saber que juega”.
Extracto de “El derecho al delirio” que aparece en “Patas arriba. La escuela del mundo al revés”, de Eduardo Galeano.
¡Gracias por tu legado!
Imagen: iNFO | news
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