jueves, 3 de abril de 2014

Laberintos

El Prisionero Del Laberinto
Habían pasado tres semanas y ese hombre no salía del laberinto por más planos mentales que construyera en su cabeza. Todos los caminos se le antojaban familiares, cada pared estaba repetida, reconocía cada esquina y ni el viento ni la luz del sol entraban en aquél torbellino de calles enredadas.
“¿Por dónde entró esa mariposa?”, se preguntó mientras un sexto sentido lo impulsaba a seguirla incondicionalmente, haciendo oídos sordos al juicio de la razón. El pequeño insecto aleteó con la misma fuerza y dirigencia que un ejército de soldados y guió al prisionero del laberinto hasta conquistar la salida... Y es que muchas veces lo que pone luz en nuestras tinieblas no es el foco de la razón, sino la chispa de la intuición.
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Algunas Reflexiones De @alejodorowsky Sobre Laberintos:
La finalidad de recorrer un laberinto no es buscar la salida, es llegar a su centro. Sumérgete en lo que en verdad eres.
El intelecto retuerce los caminos que son simples y los convierte en laberintos con mil entradas y ninguna salida.
Un laberinto es una simple línea recta, desordenada.
Un laberinto es la aparente complicación de una simple línea. Cuando una simple verdad no te conviene, te parece complicada.
La esencia del mundo es la abundancia. Cada línea recta es un laberinto disfrazado.
En el centro del oscuro laberinto de universos vas girando alrededor de ti mism@. El fuego arde en la palma de tus manos.
Línea retorcida en laberinto, no sabes que eres tú la que se recorre. 
La finalidad de recorrer un laberinto no es buscar la salida, es llegar a su centro. Sumérgete en lo que en verdad eres.
Para salir del laberinto, sin pavor déjate tragar por el corazón de tu sombra.



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Imagen: The Maze by Jarek Marczak 
Montaje de Imagen: Manny Jaef 
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