«La familia actúa como un molde y no nos damos cuenta de que en el camino hacia la propia autonomía intentamos encajar en él para sentirnos aceptados y así asegurar nuestra supervivencia. En muchas ocasiones, sin ser conscientes de ello, esta adaptación la realizamos a través de patrones tóxicos que nos limitan y perdemos el contacto con nuestra esencia. Lamentablemente, ésta es la vía más segura para llegar a la insatisfacción. ¡En la vida no siempre hacemos lo que pensamos que estamos haciendo! Vale la alegría tomar consciencia de cómo estamos actuando, pues el resultado que obtengamos será de lo que hacemos, no de lo que pensamos que hacemos. Conocer nuestro árbol y su sistema de funcionamiento nos facilita tomar las riendas de nuestra vida y actuar en consonancia con nuestra coherencia interna.»
Tomado de Plano Sin Fin
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